Tras estos meses de inactividad forzada, vuelve a reactivar cuerpo, mente y alma a través del yoga. Resolvemos todas tus dudas para iniciarte en esta práctica con beneficios asegurados
¿Cómo te sientes tras el confinamiento? ¿Cómo está tu cuerpo? ¿Te notas sin flexibilidad, con cansancio y desánimo? Estos meses de inactividad forzada han puesto de manifiesto más que nunca la poca atención que prestamos a nuestro cuerpo, nuestro templo, “la institución -como decía B. K. S. Iyengar, fundador del yoga Iyengar-. Mantenlo limpio y puro para el alma que reside en él. El maestro está dentro”.
La falta de energía lleva a la ausencia de tono vital. Si sientes que tu cuerpo se ha convertido en un “autobús” que te lleva de un lado a otro y que el cansancio te está afectando también anímicamente, párate a escucharte, a atenderte. Atender nuestro cuerpo es atendernos a nosotros y estar en coherencia con nuestra verdadera naturaleza para así mantener en equilibrio el todo que somos: cuerpo, mente y alma.
Necesitamos volver a conectar con nosotros y vivir de forma más natural
Cuando cuerpo, mente y alma caminan en sincronía en la misma dirección surge la energía, la salud y el bienestar. Ése es el objetivo del yoga (que viene del sánscrito ‘yug’ -unir, conectar, relacionar-), una filosofía milenaria que se remonta a antes del 3.000 a.C. y que hoy día está más de moda que nunca. Nuestro estilo de vida poco sano de prisas y estrés nos pide a gritos un cambio para vivir de verdad y no sobrevivir a cada día; cada vez más personas se dan cuenta de ello, de la necesidad de volver a conectar con nosotros y vivir de forma más natural.
Hablamos sobre esta práctica con Sonia Fernández Rius, profesora de yoga desde hace 15 años, terapeuta Gestalt y experta en eneagrama. Después de que el yoga se convirtiese para ella en una tabla de salvación en una situación muy complicada de su vida quiso compartir todos sus beneficios.
Una disciplina que abarca muchos campos según tus necesidades
¿Cuáles son esos beneficios?
Muchos, ya que es una práctica o una filosofía, en función de tus necesidades. Por ejemplo, puede ser muy beneficiosa a nivel postural, si lo que tienes es problemas de espalda, o a nivel anímico, si estás en un momento delicado, e incluso te ayuda a ampliar tu capacidad pulmonar. Es una disciplina que puede alimentar diferentes campos en la persona según lo que vaya buscando.
¿Cuánto se debe practicar a la semana para poder beneficiarte?
La práctica física de asana (posturas corporales) yo la recomendaría entre dos y tres días por semana porque no es algo físico sólo, es un camino de autoconocimiento; todo lo que aprendes en la esterilla lo puedes llevar a tu vida. Si le puedes dedicar un tiempito cada día sería maravilloso, si sólo le puedes dedicar un día a la semana también lo es porque siempre es mejor que nada.
Para elegir qué es lo mejor parar ti, olvídate de modas, » Ser como todos, es no ser nadie» prueba distintas opciones y mírate, siéntete
¿Cuántos tipos de yoga hay y en qué consisten?
Hay diferentes tipos.
- El Raya yoga, el mental, está más enfocado a la meditación y llegar a conocerte a través del conocimiento del funcionamiento de tu mente.
- El Hatha yoga es la práctica física, un camino de autoconocimiento a través del cuerpo.
- El Jnana yoga es el yoga del conocimiento, representa el camino de la iluminación a través de la comprensión y la sabiduría; a través del discernimiento de lo real respecto a lo ilusorio.
- El Bhakti yoga es el yoga de la devoción, el camino del corazón.
- El Karma yoga es la acción desinteresada, actuar sin esperar el resultado de tus acciones; es decir, trascender las motivaciones egoicas. Se trata de la libertad en acción y cuando decido no hacer algo es porque estoy eligiendo no hacerlo. A veces, por ejemplo, dejamos de hacer cosas porque tenemos miedo, entonces ese no hacer sí tendría un objetivo porque hay una razón que te obliga a no hacer, que sería el miedo.
- El Nada yoga es el del sonido, a través del canto de mantras.
Al final todos buscan lo mismo, lo único es la manera distinta de hacerlo y eso forma parte también de tu búsqueda como aprendiz y practicante, tienes que experimentar y probar los diferentes caminos para ver en cuál te sientes mejor o con cuál conectas tú más.
Dentro de la práctica física está Iyengar, Hatha o Ashtang, entre otros, y eso también es una elección que se debe realizar muy atento porque no siempre hacemos lo que más nos conviene. A las personas muy activas, por ejemplo, quizá les vendría mejor una práctica más estática, de estar más tiempo en las posturas y, sin embargo, suelen buscar cosas más activas que lo que consiguen es mantenerles en el mismo lugar que ya conocen. Creo que es importante aprender a manejarse en lo incómodo.
Cuando estés en clase o practicando en casa, te invito a observar qué está pasando en ti, sentirte, ir probando opciones y finalmente decidir qué es lo que mejor para ti en ese momento.
¿Todos valen para todas las personas?
En principio sí porque el yoga se puede adaptar a cualquier persona; según algunas lesiones físicas tendrás que buscar una práctica más restaurativa o más tranquila si tienes exceso de energía. Es importante, como decía, observarte y encontrar por ti mismo lo que mejor te sienta. En ese sentido, están apareciendo modas y no siempre lo que está de moda es lo que a uno le sienta bien. Incluso la práctica que elijas no es para siempre porque estamos cambiando constantemente y, según el momento, podemos necesitar más o menos actividad.
Tenemos una idea errónea de que practicar yoga es una práctica física pero una persona puede practicar yoga haciendo meditación o cantando mantras
¿Hay alguna práctica recomendada para principiantes o depende de la persona y su momento?
Es la práctica de yoga la que se tiene que adaptar a la persona y depende de la persona y su momento.
¿El yoga tiene algún tipo de contraindicación? ¿Pueden practicarlo todas las personas?
Sí, pueden practicarlo todas las personas. Tenemos una idea errónea de que practicar yoga es una práctica física pero una persona puede practicar yoga haciendo meditación o cantando mantras. Según como te encuentres en ese momento o las limitaciones que puedas tener, tu profesor tiene que saber acompañarte con adaptaciones en la práctica.
¿Por qué recomendarías a alguien hacer yoga?
Yo entiendo que el yoga es una disciplina y hay personas que son felices corriendo o bailando, pero cómo no voy a recomendar algo que me ha sentado tan bien, una disciplina tan completa y saludable que abarca la parte física, espiritual, mental. A mí me sirve muchísimo, además acompañada de mi formación como terapeuta Gestalt, me parece una herramienta maravillosa que me ayuda muchísimo y con la que estoy pudiendo acompañar a muchas personas en la búsqueda del autoconocimiento y el equilibrio.
Naturaleza Savia destaca:
- Cuidar nuestro cuerpo es cuidar nuestro espíritu pero nos hemos acostumbrado a desatenderlo, ver el cuerpo tan sólo como un autobús que nos lleva de un sitio a otro.
- Los beneficios del yoga son múltiples a nivel físico, mental y emocional.
- Esta filosofía de vida es un camino de autonocimiento muy beneficioso para todos, sin excepción, porque tiene la posibilidad de adaptarse a la persona y su circunstancia.